Bogotá, 25 Nov (Notimex).- Las Fuerzas Militares de Colombia reforzaron la seguridad en el departamento de Chocó, fronterizo con Panamá, donde el Ejército de Liberación Nacional (ELN) inició un paro armado que ya afecta al transporte.
A través de panfletos, el grupo insurgente colombiano anunció la víspera acciones contra los vehículos que circulen por carreteras de la zona, lo que llevó a los transportistas a suspender el servicio por temor a un ataque.
Aunque hasta el momento no se han reportado bloqueos a las vías, el Ejército colombiano tomó medidas de seguridad para evitar que los rebeldes impidan la movilización de carga y pasajeros tanto por vías como afluentes.
En un comunicado, la institución informó este martes que realiza operaciones de control de área, “con el fin de garantizar la libre movilidad y la integridad de los habitantes del departamento del Chocó” (en el noroeste).
La dependencia conminó además a la población civil de la zona “a no dejarse intimidar y denunciar o informar sobre cualquier amenaza que afecte los intereses de los ciudadanos de esta región”.
El paro armado decretado por el ELN desde el lunes pasado, se produce en momentos en que se espera la liberación por parte de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el Chocó del general Rubén Álzate y sus acompañantes.
El comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta Titán, fue secuestrado el 16 de noviembre pasado, cuando realizaba un recorrido por el departamento, junto al cabo segundo Jorge Rodríguez y la abogada Gloria Urrego.
La retención del oficial llevó al presidente colombiano Juan Manuel Santos a suspender los diálogos de paz que sostiene su gobierno con las FARC desde 2012 en La Habana, Cuba, mientras son liberadas estas personas.